AlDiaVzla: Ataque a Paul Pelosi: entre conspiración y prostitución gay

Es poco lo que se conoce sobre los motivos del ataque a martillazos sufrido el pasado viernes por Paul Pelosi, esposo de la presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos EE.UU., Nancy Pelosi.

Hasta el momento, figuras como la ex candidata presidencial demócrata Hillary Clinton y el nuevo dueño de Twitter, Elon Musk, se han hecho eco de algunas teorías de conspiración e incluso algunas revelaciones de medios locales que apuntan a un posible caso de prostitución gay que «salió mal».

Fuentes policiales declararon que el ataque fue intencionado y que el agresor tenía una lista de otros posibles blancos en el Congreso. La fiscal del distrito de San Francisco, Brooke Jenkins, anunció que este lunes presentará «múltiples cargos por delitos graves» y que espera que DePape sea procesado el martes.

 

 

Posible conspiranoico

Una revisión del historial de búsquedas de Internet de David DePape, el hombre de 42 años arrestado por el ataque, reveló una fuerte obsesión por las teorías de conspiración de extrema derecha, incluidas las afirmaciones sobre la vacuna contra el Covid-19 y QAnon, uno de los grupos que participó en el asalto al Capitolio el 6 de enero de 2021.

En las semanas previas al asalto, el ritmo de las publicaciones de DePape en un blog aumentó. Publicaba varias veces al día y entre los temas incluía el negacionismo del Holocausto, la la veneración de la figura de la ultraderecha Jordan Peterson y su apoyo a Donald Trump para presentarse en 2024 con Tulsi Gabbard como su compañera de equipo

«Conspiración de extrema derecha»

El sábado, la también exsenadora Clinton publicó un tuit en el que difundía una nota de Los Angeles Times que señalaba a DePape, como un propagador de teorías conspiradoras de la extrema derecha.

«El Partido Republicano y sus portavoces ahora difunden regularmente el odio y las teorías conspirativas desquiciadas. Es chocante, pero no sorprendente, que la violencia sea el resultado. Como ciudadanos, debemos exigirles que rindan cuentas de sus palabras y de las acciones que las siguen».

 

 

El propietario de Twitter no tardó en responder a Clinton con un enlace a una noticia del Santa Monica Observer, que cuestionaba las circunstancias del ataque, afirmando que Paul Pelosi estaba borracho y DePape es un prostituto.

Según el diario, ambos se fueron desde un bar gay a casa del marido de la presidenta de la Cámara -quien se encontraba en Washington con sus guardaespaldas- y una vez allí tuvo lugar la pelea.

En la mañana del domingo, Musk escribió que «hay una pequeña posibilidad de que haya más en esta historia de lo que parece», reafirmando los hechos que se narran en el enlace que difundió.

La indignación en el seno del Partido Demócrata no se hizo esperar. El congresista por Illinois Adam Kinzinger constestó a Musk: «¿De verdad? El nuevo dueño de Twitter está difundiendo la teoría de la conspiración… incluso diciendo que hay una pequeña posibilidad».

 

 

¿Autocensura?

Ante el aluvión de críticas por su respuesta a Clinton, el también presidente de Tesla borró el tuit a primera hora de la tarde del mismo domingo, aunque ya había alcanzado gran difusión con más de 24. 000 retuits y 86.000 «me gusta».

Lo que llama la atención de este intercambio entre Clinton y Musk es que se produce apenas unos días después de que este último tomara el control de Twitter con la promesa de eliminar la moderación de contenidos, cosa que hasta el momento no ha ocurrido.

A pesar de que Elon Musk ha declarado que es un «absolutista de la libertad de expresión», ha intentado calmar a los anunciantes de la plataforma diciéndoles que Twitter no va a convertirse en «un infierno» donde se pueda escribir cualquier cosa sin consecuencias.

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